El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación publicó este viernes 24 de julio un acuerdo con el que declara estado de emergencia fitosanitaria debido al incremento significativo de la langosta voladora “Schistocerca piceifrons piciefrons (Walker)”.
El acuerdo ministerial 127-2020 aplica en todo el territorio nacional debido a la amenaza que representa la condición de esta plaga en la agricultura nacional.
Según se indica, se estableció la integración de una comisión específica con autoridades de esa cartera y que podrá invitar a especialistas y representantes de otros sectores (público, privado, académico y organismos internacionales) para emprender las acciones contra el insecto.
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Maga declara estado de Emergencia fitosanitaria por el incremento de la langosta voladora en el territorio nacional. Vía: @kmarroquin_eu pic.twitter.com/NCl2molci7— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) July 24, 2020
Funciones:
Definir lineamientos generales de operación para atender el Estado de Emergencia Fitosanitaria.
Elaborar las medidas de emergencia y el Plan de Contingencia Fitosanitaria con el apoyo de grupos técnicos especializados en la materia.
Rendir informes periódicos al Despacho Ministerial.
Otras actividades afines para atender el cumplimiento de la presente emergencia.
La ejecución de las medidas fitosanitarias estará a cargo de la Dirección de Sanidad Vegetal y del Departamento de Vigilancia Epidemiológica y Análisis de Riesgo de Sanidad Vegetal del Viceministerio de Sanidad Agropecuaria y Regulaciones.
Además, se detalla que la cartera agrícola podrá gestionar los fondos con instituciones y entidades públicas y privadas.
Combate en El Salvador
Con drones y equipos manuales de fumigación, las autoridades de El Salvador lanzaron en El Havillal, unos 160 kms al este de San Salvador, el ataque frontal a la denominada langosta Centroamericana, luego de que el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) emitiera una alerta.
En El Havillal, la plaga de la devoradora langosta tiene una presencia mayor en 17 hectáreas donde se encuentra en estado de “ninfa”, una fase temprana que facilita el control porque tiene menor movilidad en alas y patas y no puede alzar el vuelo.
La plaga ataca cultivos de granos básicos y a unas 400 especies de plantas.
Bajo un sol calcinante, soldados de la Tercera Brigada de Infantería, con sus uniformes camuflados, cargan en sus espaldas bombas provistas de pequeños motores con los que suben y bajan cerros, lugar de pasto al ganado aplicando el insecticida Malathion.
Previo a la fumigación, los soldados sostenían en sus manos mallas (redecillas) entomológicas para atrapar las ninfas color verde para un muestreo de la presencia del insecto en la zona.