La primera erupción del Volcán de Fuego el domingo soterró la aldea de Los Elotes, aldea El Rodeo, Escuintla.
Ante ello, hubo confusión de lo que cayó en el lugar, pero según las autoridades del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (ISIVUMEH) fueron flujos piroclásticos, y no lava, lo que soterró la comunidad.
El mortal peligro de los flujos piroclásticos
Los flujos piroclásticos son tomados como uno de los peligros más grandes y mortales de la actividad volcánica.
La “nube gris” se mueve como una avalancha letal de ceniza y gases tóxicos por las laderas de un volcán, en este caso el de Fuego.
Estos pueden alcanzar decenas de kilómetros por hora de velocidad y destruir todo a su paso con su temperatura “extremadamente caliente.
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Son avalanchas de lodo caliente
