Expertos latinoamericanos continúan debatiendo en Guatemala sobre los logros, avances y retos que han supuesto las concesiones forestales en la región.
En esta cita, organizada por la FAO en Petén, representantes estatales e independientes, así como miembros de organizaciones comunitarias, analizan este modelo de aprovechamiento sostenible de los bosques productivos que buscan preservar su riqueza y evitar daños al ecosistema, involucrando a distintos actores.
En la Reserva de la Biosfera
En Guatemala, la mayor parte de las concesiones forestales de manejo sostenible se encuentran en la Reserva Biosfera Maya, en Petén, y totalizan unas 371 mil 375 hectáreas divididas en las 10 concesiones vigentes.
Ahí actúan con la Asociación de Comunidades Forestales de Petén (Acofop) y el Consejo de las Áreas Protegidas (Conap), que se unieron desde el principio con la meta de proteger la Reserva Biosfera Maya de los desastres de la deforestación, de la cacería ilegal y también del saqueo de los recursos naturales y arqueológico.
Uso sostenible
El investigador Fernando Carrera, que representa a Guatemala, no dudó en recordar el objetivo que vincula a estas dos organizaciones: “Promover el uso sostenible de los recursos terrestres. Eso es la meta”.
En sus palabras, Guatemala está muy orgulloso de sus avances y de los desarrollos de sus proyectos pues “las concesiones forestales en Guatemala han sobrepasado las expectativas que motivaron su otorgamiento”.
El caso de Perú
Por su parte, un experto peruano lamentó el poco interés de su Gobierno para atender la protección del bosque frente a otros problemas como el narcotráfico, la corrupción y la economía ilegal.
Eric Fischer, de la asociación de exportadores Adex, dijo que la actividad forestal no es la más desarrollada en el país y agregó que “desafortunadamente no aporta más del 1.1 por ciento del PIB” peruano.
Explicó que su país “no es un gran exportador de madera” y que el año pasado “tan solo exportó 219 millones de hectáreas” de madera tropical debido a que la tala de árboles es una actividad difícil de realizar y difícil de aprovechar.
Perú es un país que posee una cobertura vegetal densa debido a que el 61 por ciento de su territorio es parte de la Amazonia, lo que lo coloca en la quinta posición en el listado de los países con mayor presencia de bosques primarios.
Selva amazónica
Sin embargo, tan solo el 9.4 por ciento de la población vive en áreas de selva amazónica, lo que dificulta la contratación de concesiones forestales de manejo sostenible, y los bosques en tierras comunitarias alcanzan solo el 13.6 por ciento del total.
Lamentó además la división de la administración, que tiene una “actitud más reactiva que proactiva” debido a lo pesado que se volvió su estructura y expresó su preocupación por el presupuesto, utilizando como ejemplo que las 663 concesiones peruanas están administradas por la misma cantidad de personal desde que el proyecto empezó, aunque tan solo 369 son vigentes, el 56 por ciento.
Sin embargo, destacó que las concesiones forestales son para Perú áreas de conservación y de protección de la fauna, demostrando que estas áreas, que no están utilizadas por el ser humano todo el año, se vuelven el refugio de los animales que huyen de la cacería ilegal.
Eric Fischer dejó abierta la posibilidad de dejar ingresar en el sistema a los empresarios, afirmando que sería tan beneficioso como las comunidades.
Con información de agencia EFE