Ayer se dio una de las noticias más trágicas de los últimos años en el ámbito deportivo.
Se trataba del repentino fallecimiento de Kobe Bryant quien estuvo involucrado en un accidente aéreo.
El helicóptero impactó contra una montaña cuando este viajaba con su hija y otras personas.
#EUDeportes | Muere Kobe Bryant tras accidente de helicóptero
►https://t.co/Vhc4c7Z5Sk pic.twitter.com/yi4k0Zky3D— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) January 26, 2020
Conmoción en el mundo entero
La noticia cayó de manera repentina para el gremio del deporte, una persona sana fallecía por azares del destino.
Kobe Bryant siempre fue un ejemplo dentro y fuera de la cancha y alguien que era admirado por futuras generaciones.
Segundos bastaron para que el helicóptero impactara contra la montaña y acabara con la vida de la leyenda del baloncesto.
https://twitter.com/VozAlDia/status/1221806387547791361
El honor de ganar un Oscar
Kobe Bryant es el único deportista que puede presumir haber sido un ganador de un premio tan prestigiado.
A finales de 2015, Kobe Bryant anunciaba que se retiraría al final de dicha temporada.
La leyenda del baloncesto diría adiós, después de 20 temporadas de conseguir varios títulos con los Lakers.
Imperdible video. Kobe Bryant y Michael Jordan. Kobe fue el único jugador capaz de llenar ese enorme vacío que dejaría Michael Jordan a su retiro. Se fue una leyenda NBA. Descansa en Paz 'Black Mamba'. pic.twitter.com/UZkOq9Re3k
— Retro 80s y 90s (@80s_y_90s) January 26, 2020
A raíz del retiro del mítico “24” de los Lakers surgió la idea de realizar un cortometraje basado en la carrera de Kobe Bryant.
El título de dicha producción se llamaría “Querido baloncesto” y este sería el resultado:
https://www.youtube.com/watch?v=Abt62jcdjkE
En dicho cortometraje el narra como su vida fue enlazada con el baloncesto desde temprana edad y lo acompaña con un conmovedor poema.
Aquí los versos de dicho poema:
Querido baloncesto,
Desde el momento en el que empecé a ponerme los calcetines de jugar de mi padre, disparando mi imaginación con tiros ganadores en el Great Western Forum, supe que una cosa era verdad: quedé enamorado de ti.
Un amor muy profundo al que le entregué todo, desde mi mente y mi cuerpo hasta el alma y el espíritu.
Siendo un niño de seis años, profundamente enamorado de ti, nunca vi el final del túnel, solo me veía a mí mismo corriendo para salir de uno.
Y corrí, corrí hacia arriba y abajo de cada cancha, después de cada balón perdido, por ti. Exigiste mi empuje, te di mi corazón, porque eso vino con mucho más.
Atravesé el sudor y el dolor, no porque el desafío me llamase, sino porque TÚ me llamaste. Hice todo por TI, porque eso es lo que tú haces cuando alguien te hace sentir tan vivo como tú me has hecho sentir.
Concediste a un pequeño niño de seis años su sueño Laker, y siempre te amaré por ello. Pero no puedo amarte de manera tan obsesiva por mucho más tiempo. Esta temporada es lo último que tengo que dar. Mi corazón puede atajar los golpes, mi mente puede lidiar con la dura rutina, pero mi cuerpo sabe que es tiempo de decir adiós.
Y eso está bien. Estoy listo para dejarte ir. Quiero que lo sepas para que ambos podamos saborear cada momento que dejamos juntos. Los buenos y los malos. Nos hemos dado todo lo que tenemos mutuamente.
Y los dos sabemos que no importa lo que haga después, siempre seré ese niño con los calcetines y cubos de basura en la esquina: “05 segundos en el reloj, balón en mis manos 5… 4… 3… 2… 1”
Siempre te amaré, Kobe”.
