Guatemala volvió a escucharse a escala mundial en el deporte de softbol, gracias al legado que han dejado Andy Sherman y Diana Duarte, quienes fueron inducidos al Salón de la Fama de la Confederación Mundial de softbol y beisbol (WBSC por sus siglas en inglés).
En la ceremonia realizada el 23 de mayo el puertorriqueño Tommy Velásquez, presidente de la división de softbol de la WBSC y el guatemalteco Willi Kaltschmitt miembro del Comité Olímpico Internacional y vicepresidente de la WBSC, acompañado por Gerardo Aguirre, presidente del COG, Fernando Cáceres, presidente de CDAG y autoridades de ASOSOFT entregaron los reconocimientos a los homenajeados.
Honor a quien honor merece. Duarte es una de las guatemaltecas más destacadas a nivel latinoamericano. Entre sus logros podemos destacar medallas a nivel centroamericano y campeonatos nacionales por más de 25 años, muestra de ello la WBSC la reconoció en la categoría de jugadores.
Por su parte el estadounidense Andy Sherman, más conocido por “el gringo”, dejó su parte de su vida en los diamantes del país, al ser jugador en la década de los 70s y luego llegó a formar parte del cuerpo técnico de selección nacional, en el que fue manager durante más de 10 año. Durante esa época se consiguieron los logros más importantes, lo que le valió ser ingresado al Salón de la Fama en la categoría de Servicio Meritorio.
Fue en el segundo Congreso Mundial de Béisbol y Softbol realizado en el 2017 en Botswana, cuando Sherman y Duarte fueron propuestos y admitidos.
Sherman y Duarte se unieron a Carlos Larrañaga Gomar y Carlos Cano Gómez, elegidos en 2007 como los primeros guatemaltecos en el Salón de la Fama.
En el sitial de honor del softbol mundial se encuentran 226 miembros de 35 países.
