El Parlamento de Nicaragua aprobó este martes una controvertida ley de ciberdelitos, conocida como “ley mordaza”, que permite al gobierno castigar con cárcel a personas y entidades que este considere difundan “noticias falsas” en medios de comunicación o en las redes sociales.
La polémica iniciativa fue aprobada con 70 votos a favor, todos de diputados del gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda), y 16 en contra, de la oposición liberal.
La ley faculta al Ministerio de Gobernación, la policía y a la estatal Empresa Nicaragüense de Telecomunicaciones (TELCOR) a investigar y perseguir los delitos que sean cometidos por medios de comunicación y aplicaciones informáticas que producen, reproducen y transmiten gráficos y textos.
Según los sandinistas, con esta ley se inhibirá a las personas de “provocar, incentivar, motivar o calumniar a través de las redes sociales porque cometen delito, que están tipificados en el Código Penal”.
“Se les acabó el negocio a los mentirosos, a los que son parte de la industria de las mentiras en la redes sociales, a los que crean y difundan falsas noticias creando alarma, temor y zozobra, afectando la estabilidad económica, el orden público”, dijo en el debate el diputado oficialista, Emilio López.
La Ley Especial de Ciberdelitos que aprobamos hoy en la @AsambleaNi tiene como objetivo prevenir, investigar, judicializar y sancionar todas las formas de Ciberdelitos #UnidosEnVictorias @BelzabethCente3 @erickriosjs @MaryuriRG https://t.co/SmwVJa4RoJ
— Carlos Emilio Lopez (@CarlosEmilioDH) October 27, 2020
Penas
La ley señala que la “propagación de noticias falsas” será sancionada con dos a cuatro años de prisión.
Si la “información tergiversada” perjudica el honor de una persona y su familia, la pena será de uno a tres años de cárcel.
Por otro lado, las publicaciones que “inciten al odio y la violencia” recibirán de tres a cinco años de prisión.
Oposición denuncia ley
Tras la aprobación de la ley, la diputada Azucena Castillo, del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), denunció que esta está “orientada a la oposición” y “viene a encender el clima de represión” que existe en el país desde las protestas antigubernamentales que estallaron en 2018.
*Con información de AFP