Más de 120 mineros murieron en un deslizamiento de terreno en unas minas de jade en el norte de Birmania. El lugar se encuentra cerca de la frontera con China. Además, la tragedia es considerada una de las peores catástrofes de este tipo en los últimos años. “El balance total es hasta ahora de 126” muertos, informó la misma fuente.
Los mineros “fueron arrastrados por un torrente de barro provocado por fuertes lluvias”, señalaron los bomberos de Birmania.
“Las operaciones de socorro continúan”, precisaron los bomberos, luego de que un responsable local de policía indicase que las tareas de búsqueda habían sido suspendidas a raíz de las fuertes lluvias en la zona.
Hubo advertencias
La tragedia tuvo lugar cerca de la frontera con China, en un valle en el cantón de Hpakant. Este quedó completamente sumergido bajo el lodo, según imágenes difundidas por los socorristas.
Las víctimas trabajaban en el lugar de las minas a pesar de advertencias de las autoridades que las exhortaron a no dirigirse allí a raíz de las fuertes lluvias, indicó a la AFP la policía local.
“Podríamos haber tenido cientos de muertos” sin esta advertencia, agregó esa fuente.
Muertes en minas de Birmania
Docenas de mineros mueren anualmente en Birmania mientras trabajan en la lucrativa industria del jade. Los medios locales informan que estas empresas utilizan a trabajadores migrantes, con salarios bajos, para extraer esta piedra preciosa muy demandada en China.
Según la ONG Global Witness, el negocio es de varias decenas de miles de millones de dólares y muchos de los trabajadores ni siquiera están declarados.
La catástrofe del jueves era “evitable”, lamentó a la AFP Hann Hindstrom, quien trabaja para esta oenegé. A su entender, pone en evidencia la “necesidad urgente” de reglamentar esta industria.
Las minas de jade a cielo abierto de Hpakant han transformado a esa región de difícil acceso en un terreno que parece un paisaje lunar.
*Con información de AFP.