Conmoción en México por el asesinato de una joven de 22 años, embarazada de ocho meses, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado el pasado 26 de junio en una finca abandonada en la colonia Valle de Vaquerías, en Juárez.

La víctima fue identificada como Mónica Segura Temich, quien fue reportada como desaparecida desde el 1 de junio. Lo último que se supo de ella fue que había acordado encontrarse en Monterrey con una desconocida, quien le había ofreció ropa para su bebé.

El cadáver de Mónica fue hallado casi 20 días después, revelando un macabro detalle: la autopsia corroboró que el motivo de la muerte de la mujer fue la pérdida severa de sangre provocada por un corte que sus agresores le hicieron en el vientre para extraerle a su hijo.

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Descubren incubadora

Tras semanas de investigaciones, las autoridades mexicanas finalmente lograron la captura de una persona relacionada con el crimen de Mónica.

La detenida fue identificada como “Yuli N.“, de 33 años de edad, quien sería la mujer con la que Mónica se habría encontrado el día de su desaparición.

Autoridades explicaron que la sospechosa fue encontrada en compañía de un bebé de pocas semanas de edad, y más tarde se confirmó, gracias a las pruebas de ADN, que el menor era, en efecto, el hijo de la víctima.

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Días más tarde, investigadores dieron con unas instalaciones veterinarias, en cuyo interior fue encontrada una incubadora, aparato que se cree fue empleado por la detenida durante el crimen.

La hipótesis que manejan las autoridades es que Mónica fue secuestrada y llevada a ese inmueble. Allí, “Yuli N.” le habría seccionado el vientre para extraerle al bebé y colocarlo en la incubadora.

La víctima murió por un shock hipovolémico secundario producido por el corte en el abdomen.