Agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos están en búsqueda de tres niños y un adulto que se encuentran perdidos en el cauce del Río Grande, luego de que la balsa en la que intentaban cruzar la frontera entre México y EE.UU. se volteara.
Las víctimas incluyen un bebé de nueve meses de edad y dos niños de aproximadamente siete años de edad dijeron los oficiales.
Una fuente diplomática que pidió el anonimato indicó que todos los tripulantes de la balsa son de nacionalidad hondureña.
El informe compartido por el sitio en internet del Washington Post, detalla que intentaron cruzar la frontera cerca de la ciudad de Del Río, en el Estado de Texas.
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La nacionalidad de las personas extraviadas en la corriente del río no pudo ser establecida por las autoridades fronterizas.
Sobrecarga
Información preliminar señala que la balsa llevaba a nueve centroamericanos a bordo en el momento en que se volcó el miércoles a eso de las 10 de la noche.
Cerca de la frontera, los agentes encontraron a tres miembros del grupo y rescataron a otros dos, incluyendo a un niño, quien se las arregló para llegar a una pequeña isla localizada en medio del río.
El niño fue llevado a un hospital en Eagle Pass, Texas informó uno de los oficiales.
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Paso peligroso
Según los oficiales fronterizos, es común que las personas que intentan cruzar la frontera al intentar atravesar la corriente de este río, se ahoguen.
El peligro se ha incrementado en las semanas recientes debido a que el río se ha inundado con las corrientes provocadas por la primavera, lo cual coincide con el incremento de la cantidad de familias centroamericanas que intentan cruzarlo sobre embarcaciones demasiado endebles y sin ningún equipo de protección.
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La cantidad de pasos irregulares de la frontera sobrepasó los 103,000 en marzo, el nivel más alto en una docena de años, y una gran mayoría de esas llegadas son en parte por grupos familiares.