En el ascenso de su carrera, Michael Jackson, adoptó un chimpancé llamado “Bubbles”, quien tenían una vida llena de lujos. Incluso hasta era cuidado por una niñera.
El mamífero fue entregado al Centro para los Grandesimios en Estados Unidos.
Actualmente el chimpancé tiene 35 años y así vive.
Una vida normal
Bubbles vive ahora como cualquier animal de su especie. Antes podía comer dulces, ahora prefiere frutas, verduras y galletas de proteínas. “Es una fanático del mango”, comentó Patti Ragan, fundadora del santuario ubicado en el bosque de Florida.
“Es amante de la pintura y se la pasa jugando con otros animales en el reconocido refugio en Estados Unidos. También disfruta molestar a los visitantes lazándoles bocados de fruta”, agregó.
El chimpancé de Michael Jackson duerme ahora en mantas, muy distinto a lo que el artista lo tenía acostumbrado.
“El único hábito que aún mantiene es el odio a las cámaras, cuando mira una, les tira arena”, prosigue Patti.
Es también un artista
Bubbles pintó cinco obras abstractas que fueron vendidas en una galería de arte en Miami. Lo que se obtuvo fue aproximadamente dos millones de dólares.
Por años, muchos criticaron que el famoso maltrataba al chimpancé pero según su cuidadora lo desestimó por el comportamiento del animal.
“Creo que eso no es así, Bubbles tiene una naturaleza muy dulce”, concluyó.
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