Vivimos sumergidos en un ritmo de vida acelerado, dónde los tiempos corren, nada nos puede esperar.
Entre preocupaciones, presiones, exigencias impuestas por nuestras responsabilidades, fechas a las que llegar con el trabajo terminado, horarios que cumplir, los hijos, las cuentas. Tantas son las excusas que a veces creemos que lo que sentimos es un cansancio normal, de causa y efecto debido a la rutina a la que nos sometemos todos los días.
El estrés agudo, presenta, sin embargo, ciertas características debido a esa vorágine entre el pasado reciente que nos presiona y las prisas que padecemos a las puertas de un futuro inmediato. Te contamos de qué se trata.
Puede que el estrés agudo en cortas dosis, ciertamente, en circunstancias específicas, nos haga movilizarnos con agilidad durante las actividades rutinarias, lo arriesgado es caer en un cansancio desmesurado que nos provoque dolores de cabeza, tensiones, agonía psicológica, problemas gástricos, entre otros derivados del estrés que afectan severamente a nuestra salud.
Los motivos del estrés agudo
No siempre sabemos encontrar el origen del estrés que se padece ni reconocen los síntomas fácilmente. A veces se trata de un trabajo que debemos entregar en una determinada fecha, la pérdida de un empleo, etc. Todas estas pueden ser causas de un estrés agudo que quizás estemos ignorando.
¿Cuáles son los síntomas del estrés agudo?
La agonía emocional
Se trata de una mala mezcla de tres tipos de emociones: depresión, enojo y ansiedad. Todo se presenta al mismo tiempo provocando una carga emocional muy intensa.
La tensión muscular
La inflamación muscular provocada por este tipo de estrés, se manifiesta con dolores intensos de cabeza, de nuca, de espalda. Son dolores que si no se tratan a tiempo pueden derivar en desgarro muscular. En otras circunstancias también conllevan a inconvenientes en ligamentos y tendones.
Problemas de origen gástricos
La acidez es muy común en los casos de estrés. Una acidez intensa, dolores en la boca del estómago, reflujo gástrico, como también gases, estreñimiento o diarrea.
El curso de detectar el estrés agudo
El inconveniente de esta enfermedad es que no se la detecta de inmediato si no tomamos en cuenta las posibles causas que la provocan. No es una enfermedad que se detecte y diagnostique en lo inmediato como ocurre con una gripe, una mal estomacal, algo que se identifique mediante un análisis clínico. Sucede que debes aprender a reconocer los síntomas, recordar las causas, los problemas y las presiones que has tenido recientemente, para que el médico tratante pueda llegar a una conclusión acabada de lo que has ´pasado sumado a los síntomas que presentas físicamente.
Afortunadamente, es perfectamente tratable. Con un tratamiento adecuado, los síntomas irán disminuyendo de a poco.
Es importante tomar conciencia de lo que se trata este tipo de estrés. Mucha gente padece a menudo de estos síntomas, pues vive la vida con el motor en marcha y con los pies sobre el acelerador constantemente. No se dan un tiempo para si mismas, todo es rápido, urgente, las responsabilidades se multiplican y se desorganizan demasiado. En ese caos el estrés agudo está presente frecuentemente.