El asteroide, llamado “2016 NF23”, tendrá su máximo acercamiento a nuestro planeta mañana 29 de agosto a algo menos de 5 millones de kilómetros o el equivalente a 13 veces la distancia entre la Tierra y la Luna.
La enorme roca espacial está viajando a más de 32.000 kilómetros por hora y ha sido categorizada como un objeto potencialmente peligroso dada su trayectoria y tamaño. Los objetos potencialmente peligrosos son aquellos que alcanzan una distancia mínima que es igual o inferior a 0,5 unidades astronómicas de la Tierra y tienen una magnitud absoluta de 22 o más brillante. El 2016 NF23 tiene una magnitud absoluta de 22.9.
La NASA se pronuncia
Y después de varios días de especulaciones, la NASA finalmente ha decido pronunciarse sobre la enorme roca. Lindley Johnson, un oficial de la Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria de la NASA, dijo que en un principio no representaba ningún peligro para la humanidad.
“No hay absolutamente nada preocupante con el paso del 2016 NF23”, dijo Johnson al sitio web Space.com. “Este objeto simplemente se designa como un asteroide potencialmente peligroso porque su órbita se encuentra dentro de un radio de ocho millones de kilómetros de la órbita de la Tierra, pero no hay nada peligroso para la Tierra sobre este paso del asteroide.”
Preparándose para el peor de los escenarios
Sin embargo, a pesar de que la NASA a querido restar importancia al paso del 2016 NF23, el pasado 20 de junio la Oficina de Política de Ciencia y Tecnología de los Estados Unidos publicó un nuevo informe titulado “Estrategia y plan de acción nacional para la preparación de objetos cercanos a la tierra”. El plan, que es un documento de 18 páginas, describe los pasos a seguir por la NASA y la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA) para evitar que asteroides peligrosos impacten contra la Tierra y preparar al país para las consecuencias catastróficas de tal evento.
Si bien las posibilidades de un impacto de asteroides son bajas, las consecuencias son muy graves. El funcionario de FEMA, Leviticus Lewis, dijo que EE. UU. necesitaba estar preparado para todas las posibilidades.
“El impacto de un asteroide es uno de los posibles escenarios para los que debemos estar preparados”, dijo Leviticus Lewis, jefe de la Subdirección de Coordinación de Respuesta Nacional de FEMA, durante una teleconferencia, agregando que las posibilidades de un impacto de un asteroide catastrófico son bajas, pero las consecuencias son muy graves, por lo que hay estar preparado.
Desviar asteroides
Hay quien cree que la NASA está trabajando ahora mismo en un plan secreto para desviar el asteroide 2016 NF23. Esto es debido a que el nuevo plan abarca cinco objetivos. El primer objetivo es un esfuerzo liderado por la NASA para mejorar la capacidad de los EE. UU. para detectar, seguir e identificar asteroides cercanos a la Tierra.
El segundo objetivo de la NASA es garantizar que las diferentes agencias gubernamentales estadounidenses puedan acceder fácilmente a la información del impacto de los asteroides. FEMA y otros equipos de manejo de emergencias estarán informados en todo momento para prepararse ante el impacto de un asteroide y mitigar las consecuencias. El tercer paso es idear una forma de desviar un asteroide entrante. La agencia necesitará tecnologías que puedan utilizarse rápidamente, acercarse a los objetos cercanos a la Tierra y redirigir el asteroide para que no sea una amenaza.
El cuarto objetivo es colaborar con otras naciones. La Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria de la NASA ya se ha asociado con la Oficina de Asuntos del Espacio Ultraterrestre de la ONU. Por último, el gobierno de los Estados Unidos ha desarrollado un plan de emergencia en caso de que un asteroide cercano a la Tierra en el caso de que fuera detectado o impactara contra la Tierra. La NASA y FEMA han desarrollado procedimientos de emergencia para cubrir impactos catastróficos de asteroides.