El actor Nicolas Cage, de 54 años, ha perdido parte de su fortuna al realizar compras extrañas y extravagantes.
Grandes éxitos como Tesoro Nacional y El Vengador Fantasma ayudaron a Cage a tener una fortuna de 150 millones de dólares, pero sus compras redujeron su fortuna a solo 25 millones de dólares.
Gran parte de la fortuna del ganador del Oscar fue para comprar casas caras en todo el mundo.
Cage llegó a tener 15 casas que incluían una mansión frente al mar de 25 millones de dólares en Newport Beach, California, una propiedad rural de $15,7 millones en Newport, Rhode Island, y una plataforma de $8,5 millones en Las Vegas.
Como si eso no fuera suficiente, el actor también compró dos castillos en Europa: uno en Etzelwang, Alemania, que le costó $2.3 millones en 2006, y otro en Midford, Inglaterra, que obtuvo por $10 millones.
Cage también se consiguió una isla desierta en las Bahamas por $3 millones y la infame mansión LaLaurie en Nueva Orleans, que algunos dicen que es una de las casas más embrujadas del país.
Su manejo de su inversión en bienes raíces fue tan pobre que varias de sus propiedades entraron en ejecución hipotecaria y una vez tuvo que pagar $6.3 millones en impuestos.
Pero algunas de las compras más extrañas del actor son artículos únicos, aparentemente inútiles.
Cage compró un cráneo de dinosaurio de 70 millones de años de antigüedad, por 276 mil dólares.
El actor también amasó una colección de cómics por valor de $1,6 millones que incluía el primer cómic de Superman, que compró por $150 mil.
Parte de la fortuna del actor fue para comprar cabezas pigmeas encogidas.
El actor también compró un pulpo como mascota, por 150 mil dólares.
Cage compraba “incontrolablemente” y necesitaba un sueldo anual de 30 millones de dólares, solo para mantener su estilo de vida, informó The Telegraph.
Cage demandó a Samuel Levin, alegando que su exsocio era el culpable de las inversiones arriesgadas que lo llevaron “por el camino hacia la ruina financiera”.
Con información de Daily Mail