¿Estás seguro de que tú ya has amado a alguien de manera real e incondicional? ¿Cómo lo sabes?
Si estás 100 % seguro de lo que sientes, la lista siguiente es lo opuesto a lo que estás experimentando; pero si estás confundiendo amor con algo más, te identificarás fácilmente con estas señales.
Tus planes futuros no están influenciados por la presencia de esa persona.
El dolor del otro realmente no llega a causarte ninguna emoción negativa.
Jamás has sentido que los éxitos y las satisfacciones de esa persona también sean tuyos.
No encuentras ninguna razón real para sacrificarte, en ciertos momentos, por quien dices amar.
Imaginar el final de tu relación no te causa terror.
Estás seguro y demasiado consciente de que existen cientos de personas mejores con las que podrías estar.
Si la persona que quieres te pidiera un favor grande e importante, dudarías en hacérselo.
Cualquier cambio físico que a ti no te parezca atractivo en él o ella, te hace dudar de lo que sientes.
Consideras que tu relación jamás será más importante que tu trabajo, tus amistades, tu diversión o tu familia.
Los defectos de tu pareja te parecen los más desagradables.
Piensas que entre más se demore el momento de formalizar un compromiso, mejor para ti.
Continuamente reflexionas sobre todo lo que te estás perdiendo por estar con esa persona.
Comparas a tu novio(a) con alguien más y analizas si estarías mejor en otra relación.
No admiras a quien tienes a tu lado.
Cada que le dices “te amo” tienes la sensación de estar cumpliendo con algo.
Te crees mejor, en todo sentido, que la persona a la que crees amar.
