Una denominada “pandilla sexual” es acusada de violar a más de mil menores en lo que podría ser el peor escándalo de abuso infantil en Gran Bretaña.
Las niñas de la ciudad de Telford, Shropshire, fueron drogados, golpeados y violados a manos de una pandilla activa desde la década de 1980.
Se dice que las autoridades no profundizaron las denuncias, y que muchos perpetradores quedan impunes, mientras que se afirma que en la zona continúa el abuso similar.
Las cifras del Ministerio del Interior muestran que hubo 15,1 delitos sexuales por menores denunciados por cada 10 mil residentes en el año hasta septiembre de 2015.
La población de Telford es de 155 mil, lo que significa un potencial de 225 víctimas.
La diputada conservadora de Telford, Lucy Allan, ha pedido previamente una investigación al estilo Rotherham sobre las acusaciones y calificó los últimos informes como “extremadamente serios e impactantes”.
“Ahora debe haber una investigación independiente sobre la explotación sexual infantil en Telford para que nuestra comunidad pueda tener absoluta confianza en las autoridades”, dijo al periódico.
Una madre y cuatro adolescentes han sido vinculados a las acusaciones de abuso.