En definitiva, la infancia es una de las etapas más lindas de nuestra vida…sin embargo, como todo en la vida, no es siempre color de rosa. Algunas situaciones nos marcan para siempre, y a veces es superar ciertas heridas; sobre todo si hablamos de esta etapa inicial.
¿Alguna vez te has preguntado qué es lo que tienes que hacer para sanar? Hoy quiero compartir contigo algunos consejos de los expertos para lograrlo.
1. Acepta la herida como parte de ti. ¡Esto es sumamente importante! Acepta que te duele, acepta que esa herida es parte de tu vida…no la niegues. Si haces esto, ya diste un paso adelante hacia la sanación, y el proceso será aún más rápido.
2. Aceptar el daño que te haces, si caes ante el temor y el reproche. Eso de buscar a quién echarle la culpa, solamente nos llenará de rencor y nos quitará energía. El perdón es parte de este proceso de sanación y es sumamente importante; perdonar y perdonarte es dar pasos agigantados a la sanación. Por otro lado, debemos asumir la responsabilidad sobre nuestra vida, nuestras acciones y decisiones.
3. Date permiso de enojarte. ¿Quién dice que enojarse es malo? Para nada, obviamente debemos saber cómo canalizarlo; los expertos recomiendan enojarte con las personas que te han hecho daño y perdónate. Si no lo expresas o lo dejas salir, eso se convertirá en rencor y en resentimiento. No reprimas tu dolor…que fluya y luego sigue el proceso.
4. Camina hacia la transformación. No olvides que en esta vida aprendemos de cualquier experiencia que se nos presente, así sea la más dolorosa o negativa. Recuerda que estás caminando hacia un proceso de sanación, y para que esto ocurra, es necesario evolucionar, cambiar, y trascender.
5. Observa el mundo con y sin herida: Debes ser consciente de lo apegado que has estado a tu herida, deja de echarte la culpa, perdónate, no te juzgues y ahora céntrate en sanar. Date cuenta de lo maravillosa que es la vida sin ese dolor que tanto te agobiaba.
6. Apóyate en tu círculo social. Es sumamente importante encontrar apoyo en tus seres queridos, no lo olvides. Esto también es importante a la hora de querer sanar tus heridas.
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