El papa Francisco ha distribuido una postal navideña que muestra a dos niños que fueron víctimas del bombardeo nuclear de Nagasaki en 1945. La tarjeta está acompañada de las palabras “el fruto de la guerra” y su firma, como un recordatorio de quienes son los más afectados por las guerras señala el mensaje adjunto.
La foto es de un niño que carga a su hermano muerto mientras espera su turno en el crematorio. Fue tomada por el fotógrafo de la Marina de Estados Unidos Joe O’Donnell poco después del lanzamiento de la bomba al concluir la II Guerra Mundial.
El mensaje de líder de la iglesia católica indica: “La tristeza del pequeño niño se expresa únicamente en su gesto de morderse los labios rebosando en sangre.
El papa Francisco anteriormente ha condenado el uso de armamento nuclear. En el Vaticano recientemente sostuvieron una reunión diez ganadores del Premio Nobel de la Paz, para abordar el tema.
Papa Francisco teme que las armas nucleares terminen en manos de extremistas.
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— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) November 10, 2017
