El papa Francisco no duda en defender a sus “hermanos rohinyás”, una minoría musulmana que según Naciones Unidas es víctima de “limpieza étnica” en Birmania, pese al riesgo de molestar a la mayoría budista del país.
Regalan un Lamborghini al papa Francisco y decide subastarlo.
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– ¿Quiénes son los rohinyás? –
Antes del estallido de la violencia en agosto, cerca de un millón de musulmanes rohinyás vivía en Birmania, algunos desde hace varias generaciones. Sin embargo, desde la ley de 1982, están privados de la nacionalidad birmana y constituyen la mayor población apátrida del mundo.
Son víctimas de múltiples discriminaciones: trabajo forzado, extorsión, restricciones a la libertad de movimiento, reglas de matrimonio injustas y confiscación de tierras.
Tienen también un acceso limitado a la educación y a otros servicios públicos. En un informe, Amnistía Internacional no dudó en hablar de situación de “apartheid” la semana pasada.
Desde 2011 y la disolución de la junta militar que reinó durante casi medio siglo en el país, las tensiones entre comunidades se incrementaron, con violencias mortales en 2012.
El Papa critica el uso de teléfonos durante la misa.
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– Las palabras del papa –
Pocos días después del inicio de la violencia en agosto, el papa había querido “expresar toda su cercanía” refiriéndose a sus “hermanos rohinyás”.
“Todos nosotros pedimos al Señor que los salve y que inspire a los hombres y mujeres de buena voluntad para que los ayude a que todos sus derechos sean respetados”, agregó.
Ante miles de fieles en Roma, en febrero, ya había hablado de “gente buena y pacífica” que “sufre desde hace años” y denunció el tratamiento que se les reserva: “tortura y muerte debido a sus tradiciones y a su fe”.
Papa francisco reconoce que a veces se duerme mientras reza.
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– ¿Utilizar la palabra ‘rohinyá’? –
¿Llegará el papa a pronunciar la palabra ‘rohinyá’, tabú para los birmanos, durante su visita? Temiendo sobre todo una reacción de los budistas extremistas, el arzobispo de Rangún, Charles Bo, primer cardenal del país, le recomendó evitarla y hablar más bien de “musulmanes del estado de Rakáin”.
Esta terminología oficial, neutra, es la que querría imponer la dirigente birmana Aung San Suu Kyi para evitar la guerra semántica entre la denominación “bangladesí” (utilizada por la mayoría budista de Birmania) y “rohinyá” (empleada por estos musulmanes para referirse a sí mismos).
El término “bangladesí” se debe a que en Birmania son considerados como inmigrantes ilegales del vecino Bangladés, pese a que muchos de ellos vivan en el país desde hace varias generaciones.
Con información de la agencia: AFP
El papa pide el fin de la guerra, "masacre inútil con la que se pierde todo".
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