“Venezuela rechaza categóricamente los intentos del gobierno de los Estados Unidos de América de desconocer la voluntad soberana del pueblo venezolano, ejercida a través del voto el pasado 15 de octubre, en estricto apego a su Constitución”, señaló la cancillería en un boletín.
Según el poder electoral, acusado de servir al gobierno, el oficialismo ganó 17 de las 23 gobernaciones y la oposición cinco, mientras un estado seguía en disputa. Los resultado fueron desconocidos por la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
Según la cancillería, Estados Unidos solo busca “alentar y respaldar los llamamientos al caos, la inestabilidad, la violencia y el extremismo que promueve un sector minoritario de la sociedad venezolana”.
Las elecciones se realizaron tras meses de protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro que dejaron unos 125 muertos.
Estados Unidos condenó este lunes la organización de las regionales, al señalar que no fueron ni “libres” ni “justas”, y reiteró su apoyo “al pueblo venezolano en tanto busca restaurar su democracia”.
“La voz del pueblo venezolano no fue escuchada”, acotó el Departamento de Estado en un comunicado.
Venezuela, que calificó de “injerencia” y “agresión” el comunicado de Washington, también aseguró que la Unión Europea “cuestiona la voluntad el pueblo venezolano”.
“Se comprueba así el plan alevoso y desesperado, concebido en capitales europeas días antes de las elecciones, para atacar nuestra democracia”, expresó el canciller Jorge Arreaza en Twitter.
Según el canciller español, Alfonso Dastis, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, “ha mencionado que los resultados (de las regionales) son sorprendentes, que hay que averiguar qué es lo que ha ocurrido en realidad”.