El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró este viernes en la Casa Blanca que su gobierno no levantará sanciones a Cuba mientras no haya en La Habana una restauración de las “libertades” a los cubanos.
“Como ya lo he anunciado antes en la Pequeña Habana (en Miami), no vamos a levantar sanciones contra el régimen de Cuba hasta que haya total libertad política para el pueblo cubano”, dijo Trump en la Casa Blanca, durante la ceremonia de celebración del Mes de la Herencia Hispana.
Esa ceremonia se realiza todos los años en la Casa Blanca para honrar el legado de la comunidad latina en Estados Unidos, aunque este viernes diversas organizaciones decidieron no participar de la festividad.
Washington y La Habana habían sorprendido al mundo a fines de 2014 al anunciar un proceso de reaproximación que condujo al restablecimiento de las relaciones diplomáticas formales en 2015.
Esa reaproximación incluía un proceso de “normalización” de las relaciones que debería desmontar la enmarañada base legal en la que se apoya el embargo comercial y económico de Estados Unidos hacia Cuba.
Sin embargo, con la llegada de Trump a la Casa Blanca ese proceso quedó estancado.
En julio, durante un acto en Miami, Trump anunció el fin de la política seguida por Washington hacia Cuba durante el gobierno de Barack Obama y la adopción de una línea más enérgica, sin levantamiento de sanciones.
Las relaciones bilaterales se encuentran nuevamente bajo fuerte tensión luego de denuncias del Departamento de Estado sobre “ataques” a diplomático estadounidenses en La Habana, incidentes en los que Cuba niega cualquier responsabilidad.
A raíz de esa denuncia, Estados Unidos redujo a la mitad el personal de su embajada en La Habana y al mismo tiempo expulsó a 15 diplomáticos de la representación cubana en Washington.