Más de un millón de personas pidieron a los partidos políticos mexicanos que destinen los fondos que reciben para financiar sus campañas a los damnificados por los terremotos que este mes sacudieron el país, una opción que el órgano electoral consideró “viable” jurídicamente.
La petición ciudadana, subida a la plataforma web Change.org, acumula hoy 1,28 millones de firmas, y propone que “los recursos que reciben los partidos para impulsar su promoción partidista se canalicen a la reconstrucción de las áreas afectadas y al mejoramiento de los servicios de la región”.
Está dirigida al Instituto Nacional Electoral (INE), al presidente de la Cámara de Diputados y del Senado, así como a los dirigentes de los principales partidos políticos.
La petición se publicó con la intención de ayudar a las zonas afectadas por los sismos ocurridos los días 7 y 19 de septiembre pasados en el sur y centro del país dejando 98 y 286 muertos, respectivamente.
El escrito propone que “cancelen los anuncios inútiles en espectaculares, gallardetes y campañas de promesas huecas” y este dinero se destine a “beneficios perdurables”, como drenaje, alumbrado, pavimentación o áreas verdes.
“Se puede asignar a cada partido político una zona para que se encargue de su recuperación”, apunta, y sugiere que los partidos difundan sus avances en un cronograma.
El presidente del INE, Lorenzo Córdova, publicó un vídeo en sus redes sociales en el que aseguró que hay una “ruta legal” para que estos fondos puedan transferirse a los afectados.
“Sí existen mecanismos jurídicos viables para que (los partidos) puedan destinar los recursos que reciben del Estado para apoyar a los damnificados de los sismos”, aseveró.
Dijo que el INE ha sugerido a los líderes de los partidos políticos un camino, pero que sigue trabajando “para explorar otras modalidades legales posibles”.
“Un vez que esa ruta está abierta, le corresponde a los partidos políticos actuar en consecuencia”, concluyó Córdova.
Los mexicanos acudirán a las urnas el 1 de julio próximo para renovar 3.416 cargos, entre ellos gobernadores de nueve estados, así como diputados y senadores.
