Una pastelera pasó horas preparando un pastel con una apariencia peculiar.
Esta mujer hizo una torta de orgía para un cliente anónimo, sospechoso de ser un swinger (intercambio de pareja), con una escena de adultos completa.
El intrincado diseño no ahorra ningún detalle y cuenta con tres parejas en un dormitorio con varios elementos, desde juguetes sexuales hasta ropa interior, que se pueden ver tirados en el suelo.
Natalie Burnett dice que tomó el extraño escrito de un pastel “limpio, pero descarado” con un tema de swingers, y fue a la ciudad para entregarlo.
