El vestuario de la selección de Bélgica ha sido el foco de muchas informaciones en la prensa internacional a lo largo del Mundial Qatar 2022, por lo que este martes salieron a dar la cara Thibaut Courtois y Eden Hazard a una conferencia de prensa a la que previamente tendrían que haber asistido Jan Vertonghen y Yannick Carasco.
Las informaciones publicadas por “L’Equipe” y diversos medios de Bélgica, son en su mayor parte conflictos internos en el vestuario que se han originado por el irregular Mundial de los belgas, que llegan a la última fecha de la fase de grupos con chances reales de quedar eliminados. Entre los conflictos se destacan la supuesta pelea de Vertonghen con Eden Hazard y De Bruyne, tras la derrota ante Marruecos; y se le unen las palabras de De Bruyne en las que comentó que Bélgica “no tiene opciones de ganar el Mundial” y que es un equipo “envejecido”.
Hazard, sereno
El capitán de la selección belga comentó que ha sido una exageración todo lo que se ha dicho sobre el vestuario y expresó que se preparan al máximo para sacar adelante el partido ante Croacia.
“No ha habido gran cosa, todo lo que se dice se ha exagerado. Hemos tenido una reunión ayer y hemos hablado de muchos temas. También estuvo Roberto Martínez. Tenemos dos días para preparar el próximo partido y intentar ganar”, expresó Hazard.
Sobre la supuesta pelea con Vertonghen comentó que no hubo conato de bronca tras la derrota y que el vestuario era normal que estuviese molesto por el desempeño.
“No, no ha habido ninguna discusión con él después del partido con Marruecos. Es un momento complicado, el más complicado para mí con la selección, pero los grandes equipos tienen momentos complicados. Por eso tenemos que estar más unidos y ganarlo en el campo”, añadió.
Courtois, estalla ante las polémicas
El guardameta de Bélgica estalló ante lo que se ha dicho sobre el vestuario, descarta un filtrador dentro del grupo y confesó que dentro de su molestia rompió un banquillo del vestuario con el puño.
“Se contó una historia que no existía (sobre los conflictos en el vestuario). Rompí un banquillo con el puño. Por supuesto, todos estábamos decepcionados, pero nadie se gritó el uno al otro. Eso no sirve. Para eso están las reuniones de equipo”, inició.
“Es una locura pensar eso. Dentro trabaja mucha gente a parte de los jugadores, puede que alguien dijera algo. No tenemos la necesidad de buscar a quien haya filtrado algo. Eso sí, si le encontramos, será su último día en el equipo”, concluyó Courtois, quien añadió que están enfocados en ganar el jueves para pasar.