El joven entrenador Lionel Scaloni seguirá al frente de la selección argentina de fútbol hasta la Copa América Brasil-2019, sin que se pueda saber aún si contará en el plantel con el estelar delantero Lionel Messi.
Scaloni dejó de ser interino y pasó a ser el sucesor formal del desplazado Jorge Sampaoli, cesado tras el Mundial de Rusia-2018. Se descuenta que aceptará el ofrecimiento de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), aprobado este jueves en una asamblea de representantes de los clubes.
“Está conformando un grupo con identidad que defiende la camiseta”, había anticipado la decisión el presidente de la AFA, Claudio Tapia.
Scaloni, de 40 años, fue nombrado en forma temporaria a raíz de la triste y gris eliminación de Argentina en octavos de final del Mundial frente a Francia, que lo batió 4-3.
Entre los candidatos que habían figurado al principio estaban Pep Guardiola (Manchester City, Inglaterra), Diego Simeone (Atlético de Madrid, España), Mauricio Pochettino (Tottenham Hotspur, Inglaterra) y Gerardo Martino (Atlanta United, Estados Unidos). Hubo algunos contactos informales y nada en firme.
Lo primero que hizo Scaloni al asumir la interinidad fue ponerse en contacto telefónico con Messi, cuyo ánimo estaba por el suelo, como los del resto del plantel después de otra frustración mundialista. El goleador se mantuvo en silencio.
“Hablé con Messi. Sabemos lo que representa para nosotros y veremos en el futuro. Tengo una buena relación con él. En estas convocatorias no va a estar y más adelante ya veremos”, sostuvo en aquel momento el interino.
Su postura fue clara: “No debe haber entrenador en el mundo que le venga bien que Messi no venga”.
Al cabo del breve interinato, con un equipo renovado, integrado por una ‘joven guardia’ albiceleste, tuvo un balance de cuatro victorias, un empate y una derrota.
Tapia dijo este jueves que “es importante saber qué queremos para todas nuestras selecciones. El gran propósito es generar un proyecto que abarque los aspectos deportivos, organizativos e institucionales de las selecciones nacionales”.
– Respaldo de los jugadores –
Cuando asumió el banquillo, Scaloni carecía prácticamente de experiencia en el puesto y sólo había dirigido a la selección Sub-20 que ganó este año el torneo amistoso internacional de L’Alcudia en España.
Messi no fue convocado de común acuerdo. Tampoco fueron llamados Sergio Agüero (Manchester City, Inglaterra), Gonzalo Higuaín (AC Milan, Italia) y Ángel Di María (PSG, Francia) para los juegos amistosos de Argentina.
En cambio, se produjeron convocatorias de futbolistas que los hinchas argentinos reclamaban. Entre ellos, figuraron Paulo Dybala (Juventus, Italia) y Mauro Icardi (Inter, Italia).
En el último amistoso de las fechas FIFA, Argentina le ganó a una debilitada México por 2-0 en Mendoza (oeste de Argentina), con celebrados goles de Icardi y Dybala, en la primera vez que pudieron marcar con la camiseta de la selección.
Tres días antes, la escuadra también le había ganado a México 2-0 en Córdoba (centro) y el ambiente en favor de Scaloni ya se notaba en las tribunas y las opiniones de los jugadores.
“Nosotros nos sentimos cómodos con Scaloni. No sé que va a pasar, pero se dieron los resultados y también lo que proponíamos en el campo”, había señalado Dybala.
Icardi coincidió aquella vez con su compañero en el ataque argentino: “Después decidirá la dirigencia, pero nosotros estamos muy contentos”. Casi todos los miembros del plantel se expresaron en iguales términos.
Argentina goleó a Guatemala 3-0 y a Irak 4-0, en tanto que empató con Colombia 0-0. Su único revés fue ante Brasil, con casi todas sus figuras, por 1-0, con gol sobre la hora de Miranda, en Arabia Saudita.
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