Los efectos de no dormir puede manifestarse en tu cuerpo y mermar tu salud y estos son alguno de ellos:
Te estresas más
Cuando no duermes lo suficiente se elevan los niveles de cortisol “la hormona del estrés”. Un estudio comprobó que cuando un grupo de personas durmió 6 horas en vez de 8 se elevaron significativamente sus niveles de cortisol. Dormir la cantidad de horas adecuadas ayuda a que el cuerpo tenga tiempo suficiente para restaurar los niveles de estrés que tuvo durante el día y nivelarlos para estar listo para el día siguiente.
Te da más hambre
Está comprobado que cuando una persona no ha dormido lo suficiente esto tiene un impacto directo en el cerebro y en particular en zonas que controlan el apetito. Estudios demuestran que la comida chatarra en un cerebro cansado recibe respuestas más positivas. Esto se debe a que la parte del cerebro que regula el impulso de comer se siente muy entusiasmado, pero al mismo tiempo se reduce la actividad en la corteza frontal del cerebro que se dedica a tomar decisiones racionales y medir consecuencias, lo cual hace que nos cueste mucho más trabajo frenar los impulsos.
Eres más propenso a subir de peso
Por todo lo mencionado en el punto anterior a la larga, esto tiene un impacto en nuestro peso. Estudios demuestran que entre menos horas durmamos, más propensos somos a la obesidad y que la gente que no ha dormido suele escoger comida con un nivel calórico mucho más alto que cuando han descansado bien.
Tu habilidad para concentrarte disminuye
Está comprobado que la falta de sueño afecta los lóbulos frontales del cerebro lo cual hace que la comunicación entre ellos disminuya. Por lo que en términos de concentración, se ve afectada la atención espacial, auditiva y visual. Y olvídate de hacer una actividad monótona por mucho tiempo.
Afecta tu memoria
El modo en que se almacena la memoria se ve afectado por el funcionamiento de los lóbulos frontales también, por lo tanto, sale afectada. Cuando duermes, una parte del cerebro (llamada hipocampo) reproduce lo que has aprendido mientras estabas despierto. Esto le ayuda a codificar las cosas que ha aprendido y archivarlas en la memoria a largo plazo. Si no dormimos no ocurre esto y se nos olvidan cosas importantes que por decir así “quedan sin archivarse”.
Emocionalmente irracional
La depravación de sueño estimula partes de tu cerebro que están asociadas a la depresión. Esto también hace que tengas una reacción exagerada a experiencias negativas.
Tomas malas decisiones
Como ya lo vimos en varios temas, el lóbulo frontal del cerebro sufre de estragos y debido a que en esta zona se regula la toma de buenas decisiones y el buen juicio no es difícil de entender que ésta tarea se nos complique.
Se te complica resolver problemas
Durante el sueño, el cerebro integra nuevos recuerdos con otros que ha aprendido previamente. Esto ayuda a que reconozcamos patrones y podamos resolver problemas sin tanto esfuerzo. Si pierdes sueño, te pierdes de esta ayuda subconsciente de resolución de problemas.
Acumulas residuos tóxicos en tu cerebro
Así que cuando dormimos, nuestro cerebro básicamente se limpia y lo que no nos sirve lo expulsa a través de su sistema linfático (llamado sistema glinfático). Pero cuando no dormimos, el cerebro no se desintoxica, se acumula “basura” y no se repara lo que se tiene que arreglar para que todo funcione perfecto al día siguiente.