El ministro de Justicia y Derechos humanos de Chile, Hernán Larraín, pidió hoy la pena máxima para un hombre que violó y golpeó brutalmente a una menor de un año y siete meses a quien finalmente le causó la muerte, un hecho que tiene conmovido a este país.
“Por un delito así no debería ser menos que presidio perpetuo y debería ser calificado”, señaló Larraín a los periodistas tras la presentación de una querella en contra del detenido, Andrés Espinoza, de 30 años.
El detenido tuvo que ser protegido por la Policía para escapar de las decenas de personas que le esperaban furiosas a las afueras de un tribunal.
El ministro recalcó que se buscarán “las penas máximas” para el presunto culpable, quien fue enviado a prisión preventiva por seis meses mientras la Policía realiza las investigaciones ordenadas por el tribunal.
Espinoza se encontraba detenido desde el sábado en la cárcel de Quillota, localidad vecina a Santiago, tras ser el principal sospechoso de las graves lesiones con las que llegó la menor, identificada como Ámbar, al Hospital San Camilo, de la localidad de San Felipe, a unos 80 kilómetros al noroeste de la capital chilena.
Un tío de la bebé, Ignacio Páez, aseguró hoy en declaraciones al Canal 7 Televisión Nacional, que el detenido siempre fue un hombre muy violento “y que todos lo sabían”.
“Yo estaba peleando por la custodia de la niña. Él no era competente para cuidarla, era un hombre violento y tengo pruebas”, aseguró Páez, quien acusó al Servicio Nacional de Menores (Sename) de no darle la custodia por su condición de homosexual.
Desde hace ocho meses la víctima y su hermana mayor estaban al cuidado de una tía y de su esposo, el autor del crimen, por disposición del Sename, un servicio fuertemente cuestionado por las organizaciones sociales y políticos.
Decenas de personas protestaron durante esta jornada en las afueras del tribunal de Los Andes en contra del imputado y destrozaron los vidrios del recinto.
También golpearon el automóvil del ministro Larraín, quien tuvo dificultades para abandonar el lugar.
Las personas pedían la pena de muerte para el hombre inculpado y de hecho tuvo que salir protegido con un casco policial del lugar.
El Gobernador de la localidad de San Felipe, Claudio Rodríguez, aseguró a los periodistas que los doctores que atendieron a Ámbar quedaron “muy afectados emocionalmente” y tendrán que recibir ayuda psicológica.
El Fiscal Ricardo Reinoso, del Juzgado de Garantía de Los Andes, dijo a la prensa que el inculpado trasladó a la menor hasta el servicio de urgencias por una supuesta caída y allí afirmó que producto de las lesiones la menor había fallecido.
Según Reinoso, la pena para Andrés Espinoza por el delito de violación con homicidio va desde presidio perpetuo simple a presidio perpetuo calificado. Esta última no permite al condenado acceder a ningún beneficio por el plazo de 40 años.
Fuente: EFE Noticias