Después de ver los “Osos” y el alboroto que causan algunos a la hora de celebrar y “convivir”, poniendonos la mano en el corazón queremos compartirle este manual básico para sobrevivir a los convivios de Fin de Año.
- Cumple con las normas en el lugar de trabajo: “Asegúrate de que te ves elegante y bien arreglado. Si trabajas en un ambiente corporativo, es probable que van a ir a algún lugar distinguido”.
- No exageres: “Si trabajas en un ambiente de oficina un poco relajado, no vayas a la fiesta con tu mejor traje, no sería apropiado”.
Vestirse para la ocasión - Ponte algo diferente: “Esto ayudará a crear una importante diferencia entre la importancia de la fiesta de Navidad y lo que te pones un lunes por la mañana”.
- No uses la misma ropa que llevabas a la oficina ese día: “Si todo el mundo va a hacer un esfuerzo para cambiar, haz tú lo mismo”.
Aumenta los contactos - Socializa: “Esta es la oportunidad perfecta para conversar con personas a las que normalmente no podrías hablarles o que no son de libre acceso, como el ‘gran jefe’.
- Sácale el mayor partido a ese momento”.
- No seas arrogante: “Haz que tu comportamiento esté a la altura. A medida que avanzas por el espacio te detienes a hablar con el personal de una jerarquía más alta, pero que eso no sea impedimento para ignorar a la gente de menor rango que tú”.
- Sé equilibrado
- Impresiona a la gente sin promoverte a ti mismo: “Este no es el momento para pedir un aumento de sueldo o dar alguna queja. Habla con ellos acerca de tu familia y tus vacaciones, que te vean como un miembro más del personal”.
- No rechaces a tus colegas: “Nunca descuides a tu equipo y pases toda la fiesta hablando con todo el mundo, menos con tu grupo. Igualmente, no solo te aferres de ellos”.
- Conoce tus límites
- Puedes tomar, pero no te sobrepases: “Si tomas licor más de la cuenta, es una gran equivocación. Nunca debes extralimitarte, especialmente si estás con tus superiores”.
- Cambia de bebida: “Si sientes que te estás pasando de copas, solicita otra bebida, como una gaseosa, café o jugo. Habrá personas que te presionen a seguir consumiendo licor, no te dejes llevar”.
- La mañana siguiente Sé una persona sensata: “Si al siguiente día tienes una jornada normal de trabajo, llega puntual. Organiza un día tranquilo para ti”.
- Evita la confrontación con ebrios. Si un compañero se pasa de copas y empieza a molestarte o insultarte, evita confrontarlo. Lo mejor es que te alejes o te retires del lugar.
- Pídeles ayuda a tus compañeros.
- No bailes solo. Si todo el mundo la está pasando bien en medio de la pista de baile, está bien. Pero no lo hagas cuando seas la única persona que está bailando y no por mucho tiempo.
- Evita un momento de vergüenza que pueda ser recordado por tus compañeros al día siguiente.
Centra tu atención en la forma adecuada. Esta noche se trata de afinar tus intenciones, hablando con las personas adecuadas y pasar un buen rato. Si te pasas de la raya en algún momento, la gente te recordará como una persona embarazosa. - La resaca ¡Evítala a toda costa! Si vas a un convivio y al día siguiente debes trabajar, evita tomar mucho licor. Si te pasas y estás con resaca, trátala de inmediato, consumiendo alimentos que te den energía.
- Evita quejarte con tus compañeros y haz un esfuerzo por verte fresco y animado, así no llamarás la atención de tus compañeros y, en especial, la de tus superiores.